El difícil equilibrio entre contenidos y la opinión del público

Es complicado encontrar ese cuento que gusta a todos y a todas y no escandaliza a absolutamente a nadie. Yo todavía no lo he encontrado. En la última asamblea de la Gasolinera (a la que no pude ir por motivos laborales y familiares, ya que trabajo también los fines de semana) se comentó sobre la inconveniencia de algunos temas vertidos en la actividad del cuentacuentos y desde allí y debido al "malestar generalizado" que esta acción construyó se emitió un correo para recordar sobre las buenas prácticas en el transcurso del cuentacuentos.
Sin dudarlo, nos ponemos a reflexionar y sí, claro, los cuentos a veces son BRUTALES.
Pero es que cuando uno hace honor al rigor de un texto clásico, las consecuencias pueden llegar a ser DEVASTADORAS.
Frente a ello, seguro que muchos tendrán preparado el contraataque: No es el qué sino el cómo. No es hablar de la muerte del Zarevich Ivan en el cuento del Pájaro de Fuego, sino cómo se habla de su muerte (¡sólo se dijo que lo habían despedazado!) y sobre los obsequios que se iban acumulando en la historia hicimos una LECTURA DE GÉNERO diciendo que ... ¡Había que ver con los autores de la época, cómo podrían comparar a un caballo de crines de oro o a un pájaro de fuego con una bella Mujer!
Pero ante todo, nos cargamos de nuevo con BUENA ONDA, porque las opiniones vertidas con bondad siempre son recibidas y las que vienen con maldad, pues son reflexionadas lo justo.

Les animo a que vayan a la fuente del conocimiento, a los textos originales, y a que nos cuenten una versión del Pájaro de Fuego apta para todos los públicos.
Mientras los estudiosos critican, los niños y niñas volaron como los pájaros en la mañana de Abril y cabalgaron como caballos por la pradera rusa...

Hubo por supuesto más historias y luego la que ellos y ellas contaron

Además de nuestro CUENTO COLECTIVO!

Gracias por la amabilidad, queridos y queridas lectores y lectoras.

RESISTIREM!